Rincones de Totana. La Glorieta

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Rincones de Totana. La Glorieta

En los pueblos y ciudades siempre se hizo una plaza que era el eje de la convivencia, ya que en ella se celebraban los mercados, las ceremonias religiosas al aire libre, los juicios populares, las ejecuciones y los festejos de todo tipo, el lugar de convivencia. Como ejemplos nos pueden servir las plazas mayores de Madrid o Salamanca, en las que siempre se celebraron los grandes acontecimientos ciudadanos. 

Al erigirse Totana se dejó un gran espacio libre en el cruce de caminos de Mazarrón, Lorca y Murcia, edificando alrededor los dos edificios principales, la iglesia parroquial de Santiago y el Ayuntamiento, siendo la hoy llamada Plaza de la Constitución el eje central del pueblo y utilizado para todo tipo de ceremonias en otro tiempo.

El crecimiento urbano hizo nacer más plazas de diferentes usos, de ellas, la segunda fue la Glorieta de los Frailes, espacio libre frente al convento de los Padres Capuchinos, en la que se instaló una fuente de buen agua que servía para el abastecimiento del pueblo, o por lo menos del barrio llamado Triana.

Todos hemos visto las fotografías de los aguadores esperando su turno para llenar sus cántaros con los que servir a las casas que en aquellas épocas no disponían de agua corriente como ahora. La llegada del agua del Taibilla y su instalación en los domicilios dejó sin uso a la fuente y la glorieta tuvo varias remodelaciones para convertirse en una agradable plaza para el ocio ciudadano.

El curso de la vía de entrada desde Murcia hizo que este espacio se dividiera en dos que en Totana se llamaron la Glorieta y la Glorieta Chica, siendo la segunda un pequeño espacio ajardinado que está en el chaflán que forman las calles de La Fuente y Juan XXIII con la antigua carretera.

Hoy día estos dos espacios de ocio son merecedores de nuestra atención, pues la llamada Glorieta Chica es una recoleta plaza arbolada bajo cuya sombra pueden los ciudadanos sentarse en sus bancos a descansar mientras los niños juegan. Hay también una fuente de las llamadas de pilón que lamentablemente no tiene la belleza del curso del agua.

La Glorieta propiamente dicha es un espacio rectangular elevado sobre la calle que se nominó en homenaje al buen Padre Ángel de Novelé, teniendo enfrente una estatua del mismo sacedote obra del escultor Anastasio Martínez Valcárcel.

El fondo lo ocupan la fachada de la bella iglesia de las Tres Avemarías, regentada por los P.P. Capuchinos y la entrada a los salones parroquiales embellecidos por una alegoría a San Francisco de Asís esculpida por Anastasio Martínez Valcárcel. Está cerrada por una escalera de acceso a la calle anteriormente citada y un banco corrido hasta la mitad de su superficie con una verja en el resto.

El resto está ocupado por una pequeña aunque bonita fuente lamentablemente carente de la alegre música del agua, y las terrazas de dos bares Los Rosales y La Freddo, el primero como pizzería con las mesas siempre llenas de gente joven y alegre. La Freddo es una mínima y agradable cafetería con la terraza más simpática de Totana, con la clientela mejor de Totana entre la que me encuentro yo.

Resulta en suma, un agradabilísimo espacio de ocio en el que los niños pueden jugar mientras los padres se solazan ante un café o una cerveza, coincidiendo con las personas que asisten a Misa en la iglesia conventual que está llena de exquisitas obras de arte.

 La Glorieta es uno de los rincones totaneros más gratos a los visitantes. 

Juan Ruiz García

Rincones de Totana. La Glorieta, Foto 1
Totana.com